Hace tiempo que te vengo hablando de la eyaculación precoz, por lo que ya tendrás bastante información si has ido siguiendo el blog (y si no siempre estás a tiempo de echar un vistazo). Hace ya un tiempo atrás te hablaba de la importancia de pasar de los juegos preliminares a los juegos eróticos. Y también te di algunas ideas para disfrutar del sexo sin penetración. O hablamos también de algunos cambios de rol habituales. Y hoy vengo a hablarte de 10 partes del cuerpo, distintas de los genitales, con las que obtener placer en tus juegos eróticos. Sigue leyendo para descubrirlas. O si lo prefieres también puedes verlas en este vídeo:
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10 partes del cuerpo, distintas de los genitales, con las que obtener placer en tus juegos eróticos
Si tienes eyaculación precoz y estás aquí leyendo este artículo ya tienes una gran parte ganada. Y es que un primer paso para deshacerte de la eyaculación precoz es, sin lugar a duda, evitar centrarte excesivamente en los genitales como base de tus prácticas sexuales. Y no sólo si tienes eyaculación precoz si no también si quieres disfrutar plenamente de tus relaciones sexuales y no caer en la rutina. Para ello nada mejor que desgenitalizar tus encuentros sexuales. Precisamente hoy voy a darte algunas ideas para ello. En concreto, vengo a hablarte de 10 partes del cuerpo, distintas de los genitales, con las que obtener placer en tus juegos eróticos.
1. Cuello
Es una de las partes del cuerpo preferidas por la mayoría de las personas para incluir en sus juegos eróticos. Y es que el cuello es una de las zonas más erógenas de nuestro cuerpo. Ya puede ser con besos, mordiscos, masajes, collares o con lo que se te ocurra que puedas jugar con el cuello de tu pareja sexual. Tienes algunas ideas aquí. Porque está claro que el cuello es una de las mayores zonas de acercamiento a la otra persona.
2. Lóbulos de las orejas
Los envuelve una zona muy suave de tu órgano sexual más extenso: la piel. Eso los hace ideales para ser una zona sumamente erótica. El punto clave es estimularlos con mucha delicadeza. De lo contrario a la mayoría de personas les puede llegar a resultar molesto y de lo más antierótico. Ya cuando la excitación es mayor puedes aumentar la intensidad de los juegos eróticos en los lóbulos de las orejas.
3. Detrás de las rodillas
Seguro que no has oído hablar de la corva. Y es que pocas personas la conocen y le sacan partido. Pero quien se resuelve a hacerlo no queda decepcionado. Se trata de la región situada detrás de las rodillas. Y es especialmente sensible. Basta una leve estimulación para disfrutar de ella.
4. Pies y dedos de los pies
Aunque en algunos estudios los pies son vistos como una zona antierótica. Y a pesar de que en numerosas ocasiones durante los juegos sexuales los pies son ignorados por la mayoría de personas. En realidad, en los pies se concentran miles de terminaciones nerviosas a las que se les puede sacar mucho partido. De hecho, los reflexólogos aseguran que la planta del pie está conectada a todas las partes del cuerpo. En tus manos está el sacarles provecho o no, quizás en próximos artículos te hable en mayor profundidad del potencial erótico de los pies. Sin embargo, tal vez más que con otra parte del cuerpo hay que prestar especial atención a la higiene, para que la experiencia no se vuelva algo que termine con el erotismo.
5. Espalda
La espalda es una zona del cuerpo sumamente erógena. Además, al ser extensa, se puede masajear, besar o acariciar, por nombrar sólo algunos juegos eróticos, durante mucho tiempo. Y si quieres que aún se vuelva más sensible, un poco de aceite, crema o simplemente polvos de talco puede ayudar.
6. Clavícula
Este pequeño hueso puede provocar más placer que cualquier otro del cuerpo. En primer lugar, por la piel que lo recubre que es bastante sensible. Y, en segundo lugar, por su ubicación. Al estar en una zona del cuerpo próxima a la boca, es la ruta perfecta para besarse sin parar entre otra serie de juegos eróticos.
7. Palmas y dedos de las manos
Las palmas y los dedos de las manos son muy usados por todos para dar placer. Sin embargo, rara vez son usados para recibir las caricias, besos o cualquier juego erótico que se os ocurra a ti y a tu pareja. A pesar de que tanto las palmas como los dedos de las manos son una parte muy receptiva del cuerpo. Y además también puedes aprovechar para indicar a tu pareja cómo y dónde te gustaría ser explorado.
8. Hombros
Los hombros al desnudo es una de las zonas más ideales para obtener placer en los juegos eróticos. Para rozar con los dedos, los labios, el pelo, etc. o lo que se os ocurra a ti o a tu pareja.
9. Abdomen
No hay nada más placentero que explorar el área alrededor del ombligo. Tener un encuentro sexual con juegos sexuales en el abdomen puede ser maravilloso.
10. Cerebro
No te olvides que el cerebro es el responsable de todo el placer sexual que recibes en los juegos eróticos. O sea, que todo el placer producido por las partes del cuerpo mencionadas más arriba pasa por la intermediación del cerebro. El cerebro es nuestra principal zona erógena. Pero no únicamente por los neurotransmisores o conexiones neuronales. Si no por tus pensamientos y fantasías. Y es que tus simples fantasías pueden ser suficientes para hacerte llegar al éxtasis sin necesidad de estimular ninguna otra zona del cuerpo.
La mente es la responsable de tu excitación. Tu predisposición para ser tocado es, en la mayoría de ocasiones, más potente que la activación de cualquier otra zona corporal. El disfrute y placer no dependen exclusivamente, por tanto, de la activación neurológica. Tener una concepción positiva de la sexualidad y el placer, unido a la relajación, a desear y consentir ese contacto, pueden ser suficientes para conectar otras áreas corporales, no consideradas tan erógenas por los demás, con el placer mental.
De ahí que existan los fetiches o que una persona consiga excitarse o alcanzar el clímax con la sola estimulación de las distintas partes del cuerpo o incluso a través de la simple fantasía.
¿Qué hay que tener en cuenta?
Lo primero que debes tener en cuenta es que todo tu cuerpo y todo el cuerpo de tu pareja es erotizable. Y no sólo estas 10 partes del cuerpo, distintas de los genitales, con las que obtener placer que has leído hoy. Porque presentamos terminaciones nerviosas a lo largo y ancho de toda nuestra piel. Si no también porque, además, nuestra erótica y placer sexual se ven influidos por la educación de la sociedad y por la tuya propia e individual respecto al sexo, por tu historia sexual, por tus experiencias personales y por lo que hayas asimilado de todo ello.
Algunas personas encuentran esta activación sexual a través de la alimentación o gastronomía, por ejemplo. No te pierdas el próximo artículo sobre alimentos con los que estimular tus encuentros eróticos si quieres tener algunos ejemplos de estos alimentos. Puede que unas personas activen su cuello como zona erógena solo si se besa o acaricia, y otras personas lo hagan exclusivamente cuando la estimulación es más intensa, por ejemplo. Hay varias modalidades de estimulación donde elegir. Porque no sólo la zona puede ser el desencadenante para el placer erótico y sexual, sino también la modalidad de estimulación que hayamos elegido.
¿Has identificado ya las zonas de tu cuerpo que te producen placer en tus juegos eróticos? Si no es así, quizás este sea un buen momento para descubrir tu propio mapa. Por qué cada persona es un mundo. Lo indicado en el artículo de hoy tan solo es una ligera sugerencia de por dónde empezar. Así que feliz y placentera investigación.
Pero antes de empezar debes tener en cuenta que has de crear la atmósfera adecuada para poder disfrutar con tranquilidad. En este artículo tienes más información sobre cómo hacerlo.
Si vas a tener un encuentro erótico contigo mismo o con tu pareja puedes centrarte en una sola parte del cuerpo con la que disfrutar. O puedes probar con varias de ellas. No hay ningún límite en el número de partes del cuerpo que vayas a explorar.
Y cualquier parte del cuerpo puede ser estimulada siempre que todas las personas involucradas estéis de acuerdo. Pero cada persona es un mundo así que pídele a tu pareja que vaya más allá y explore todo tu cuerpo. Puedes seguir un ritmo lento, rápido, con presión intensa, casi sin presión. Eso ya va al gusto de cada uno y del momento. Y no te olvides de ir guiando a tu pareja para que vayáis ambos descubriendo sensaciones eróticas nuevas.
Para saber más sobre la eyaculación precoz, el problema sexual más frecuente en los hombres, y sobre sexualidad en general estate atento a este blog, iremos dando información que seguro resultará de tu interés. Puedes suscribirte con el formulario que hay arriba a la derecha.
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