Hace tiempo que te vengo hablando de la eyaculación precoz, por lo que ya tendrás bastante información si has ido siguiendo el blog (y si no siempre estás a tiempo de echar un vistazo). Hoy vengo a hablarte de un tema que si tienes claro que sufres de eyaculación precoz ya tendrás clara la respuesta. Y si no siempre puedes leerte el artículo sobre los 3 primeros pasos a seguir si tienes eyaculación precoz que se publicó hace unos meses atrás. Y si no tienes claro si tienes eyaculación precoz puedes leerte toda esta serie de artículos ya publicados. Pero aún y así pueden quedarte dudas sobre la conveniencia de ir o no al especialista en tu caso particular. Y de esto precisamente hablaremos hoy: ¿Cómo saber si debo ir al sexólogo?. Para ello puedes continuar leyendo este artículo o también puedes ver este vídeo:
Índice del artículo
¿Cómo saber si debo ir al sexólogo?
No existen unos criterios oficiales que nos avisen de que necesitamos ir a terapia sexual. Cada persona y cada pareja tiene su propia realidad y experiencia. De todas formas, te convendría saber antes qué se hace en la terapia con un sexólogo para quitarte algunos mitos e ideas preconcebidas que no se ajusten a la realidad. Por otra parte, déjame decirte que sí hay unas directrices que podemos seguir como guía a la hora de tomar esta decisión:
1. Si no disfrutas de tus relaciones sexuales
Está claro que sí no disfrutas de tus relaciones sexuales algo anda mal. La terapia sexual con un sexólogo te ayudará a descubrir que es exactamente lo que anda mal. Y sobre todo te ayudará a solucionarlo.
Si no disfrutas tus relaciones sexuales puede haber múltiples causas, lo que está claro es que tus relaciones sexuales no son lo que te gustarían. Concretar estas expectativas ayudará también a ver si son realistas o no. Si son factibles de conseguir o hay que modificarlas en algún aspecto.
Puedes empezar por hacerte la pregunta de «Si yo ahora tuviera una varita mágica… ¿qué cambiaría de mi sexualidad?» Tómate un tiempo para reflexionar sobre esto. Seguramente te vengan a la mente cosas que no está en tus manos cambiar. Pero también te vendrán otros aspectos que sí que puedes cambiar. El sexólogo puede ayudarte a diferenciar ambos. Y te puede indicar los pasos a seguir para llegar a verlos realizados. Y te puede acompañar durante todo el proceso. Pero el aplicar o no los pasos ya es cosa tuya.
También puedes preguntarte «Si en mi vida sexual ocurriera un milagro y fuera tal cual como la quiero… ¿cómo sería mi vida sexual? ¿Me veo a mí mismo como estoy ahora dentro de 5 años? ¿O me veo diferente? ¿Qué cambia?» Porque está claro que si ahora no cambias nada las cosas seguirán igual dentro de 5, 10, 15 o 20 años. ¿Qué cambios en concreto en tu sexualidad te harían pensar que estás mejor? o ¿qué le dirías a una persona que se encuentra en tu misma situación?
Cuanto más concretes más fácil será saber porque no disfrutas de tus relaciones sexuales y cómo hacer para cambiar esta situación. El sexólogo puede ayudarte en todo este proceso.
2. Si tu pareja no disfruta de vuestras relaciones sexuales
Si alguno de los dos miembros de la pareja no disfruta de vuestras relaciones sexuales está claro que hay que mejorarlas. De lo contrario puede llevar a la ruptura de la pareja, entre otra serie de consecuencias. En estos casos el sexólogo siempre puede ayudar, pero es importante atajar la insatisfacción con las relaciones sexuales a tiempo. A menudo me encuentro en terapia con personas que sí, han decidido atajar el problema, pero después de llevar ya demasiado tiempo con él como para que la pareja resista. O personas que incluso evitan hablar del problema con la pareja. Siendo este uno de los mayores errores que se pueden cometer. Contar con la pareja para la terapia sexual es imprescindible. Si quieres saber por qué puedes leerte este artículo.
3. Si has intentado mejorar sin ayuda y no lo has conseguido
Esta situación es bastante común. Normalmente las personas que acuden a terapia sexual lo hacen después de un tiempo más o menos largo con el problema. Durante ese tiempo han tratado de aplicar por su cuenta y riesgo todas las técnicas sobre las que se han informado o les han informado que podían solucionar su problema sexual. Sin embargo, se han acabado dando cuenta que sin la guía del especialista es probable que esas técnicas no hayan sido lo efectivas que podrían haber sido con su ayuda. Ya sea por no ser las técnicas más adecuadas, por no estar aplicadas de la forma idónea o simplemente porque pueden aparecer otros problemas que de la mano del especialista se atajarían de inmediato.
La diferencia entre intentar mejorar sin ayuda y el intentar hacerlo con la ayuda del sexólogo es que, si lo haces del segundo modo, tendrás el apoyo de un profesional que te irá guiando pasito a pasito. Pero, no te confundas, yendo de la mano del especialista algunos de estos problemas también pueden aparecer. Por eso es tan importante que comuniques cualquier duda que tengas o cualquier dificultad que pueda surgir durante el tratamiento. Y para que se pueda dar esa comunicación adecuada es importante elegir a un sexólogo en el que puedas depositar tu confianza y hablar con total libertad de tu problema.
4. Si necesitas ayuda más especializada de la que tuviste en el pasado
Este también es un escenario común en la consulta del sexólogo. Personas que han estado en tratamiento con el médico de cabecera, con el urólogo o con otro psicólogo que no estaba especializado concretamente en terapia sexual. Y que: o bien les han terminado derivando estos mismos profesionales. O bien, han dejado esa terapia por su cuenta y ahora han terminado descubriendo que hay profesionales más especializados que los que les habían atendido en el pasado para solucionar su problema sexual. Y al darse cuenta de que existen especialistas en su disfunción sexual han decidido probar el tratamiento con estos profesionales.
La diferencia entre el médico de cabecera o el urólogo y un psicólogo especializado en terapia sexual es que los primeros tratarán la parte más física del trastorno. Que, no me mal entiendas, me parece perfecto. Pero el problema de muchas de las disfunciones sexuales es en buena parte más mental que física. De hecho, el 90% de las disfunciones sexuales tienen un componente más mental que físico. De todas formas, como siempre digo, si quieres ir al urólogo para descartar un componente físico nunca está de más.
En cuanto a la diferencia entre otros psicólogos no especializados y los psicólogos especializados en terapia sexual es que el psicólogo especializado en terapia sexual o sexólogo posee mucha más información sobre qué técnicas usar en cada caso concreto de disfunción sexual y en cómo usarlas. El psicólogo no especializado en cambio posee también esa información, pero de forma mucho más generalizada de todas las disfunciones psicológicas, no de las sexuales en concreto. Y como dicen por aquí: quien mucho abarca poco aprieta. Así que con el psicólogo no especializado pasa un poco eso, de tanto abarcar disfunciones psicológicas, sí que es verdad que posee conocimientos sobre cómo mejorar las disfunciones sexuales, pero no tan en específico como el sexólogo.
Y muchas personas que han acudido a ellos se han dado cuenta de estas diferencias y por eso han terminado buscando la ayuda del especialista.
5. Si sufres un problema sexual o tienes dudas sobre si lo padeces
Si sufres un problema sexual o si tienes dudas sobre si lo padeces lo mejor es que acudas al especialista. Como ya te he comentado antes el 90% de los problemas sexuales son de causa psicológica. Así que el primer tratamiento a elegir es el psicólogo-sexólogo. De todas formas, si quieres acudir antes a ver al urólogo para descartar algún problema físico, nunca está de más. Ellos podrán despejar tus dudas sobre si tienes un problema sexual o no y que tipo de problema sexual es. Y si efectivamente tienes un problema sexual te guiarán para que puedas solucionarlo. Por qué si sufres un problema sexual es tiempo de cambiar y mejorar tu vida sexual.
Debo ir al sexólogo, ¿qué debo saber antes?
¿Te acabas de dar cuenta que efectivamente debes ir al sexólogo? Pues déjame decirte que antes hay algunas cosas que debes hacer.
Lo primero que tienes que hacer si tienes pareja es encontrar un momento para hablar y comunicaros sinceramente el uno con el otro sobre tu problema sexual. Y luego deberéis decidir si acudís los dos a terapia. Para saber por qué el que acudáis los dos a terapia es el 90% de la solución puedes leer este artículo clicando aquí. Si no tienes pareja puedes saltarte este paso.
Como ya os habéis decidido a buscar ayuda profesional, sólo os queda encontrar al profesional adecuado. Para la mayoría de los problemas sexuales, como ya os vengo comentando a lo largo del artículo, con ir a un psicólogo especializado en terapia sexual, o psicólogo-sexólogo, es suficiente. En Psiconieves podemos atenderos si pedís cita, para ello clica aquí y tendrás la información para hacerlo.
Para saber más sobre la eyaculación precoz, el problema sexual más frecuente en los hombres, estate atento a este blog, iremos dando información que seguro resultará de tu interés. Puedes suscribirte con el formulario que hay arriba a la derecha.
Si no puedes esperar, o quieres saber aún más sobre la eyaculación precoz, siempre puedes ver el vídeo de la consultoría gratuita, seguro que aprendes mucho. Es totalmente gratuito, para poder apuntarte a verlo tan sólo haz clic aquí.
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